Entrevista con La Joya: "Somos oficialmente una pareja de novios"
Manel Moreno y Ricky Lavado son La Joya. Si cambiaras la J por la P también valdría para definirles. Hablo con ellos unos días después de lanzar 'Lower Hermosa', su primer disco.
POLAROID 600 EN EL ANTIGUO LOCAL DE ENSAYO DE LA JOYA, THE SECRET SOCIETY Y MIL GRUPOS MÁS
Manel y Ricky son dos de las personas que más admiro, más quiero y con las que más me río. Son mis amigos, con los que he compartido los últimos años en The Secret Society, con los que he vivido momentos irrepetibles y con los que hablo a diario. De la clase de amigos para los que tengo reservado dinero en mi cuenta por si pasa algo. “Yours is the funeral/ I’d fly to from anywhere”, que cantaba Yoni Wolf de Why? en These Few Presidents. Un disco y un grupo que nos gusta mucho a los tres.
La Joya nació en la segunda o tercera fase de la pandemia, cuando dejaban salir de casa pero con muchas restricciones. The Secret Society estábamos parados porque, además de la que se nos vino encima a nivel global, a finales de enero de 2020 nació nuestra segunda hija, Matilda, y yo andaba entre ajetreado y muy ajetreado. Como el local estaba la mayor parte del tiempo desocupado y lo seguíamos pagando, Ricky y Manel empezaron a quedar. Recuerdo que un día fui a verles ensayar –o quizás estaban ellos ahí ensayando desde hacía rato y llegué yo– y me quedé flipado. No sólo me gustaba la música que tocaban, sino que recuerdo sorprenderme con la sintonía emocional que transpiraban: dos personas jugando al mismo juego, todo el rato, sin ironía. No estoy seguro de si ya habían encontrado el nombre de La Joya, pero puede que no. El mundo iba a otra velocidad por aquel entonces: salas cerradas, tiendas de discos cerradas, festivales suspendidos y pospuestos para el año siguiente, artistas pesados haciendo directos en Instagram; ya sabes de lo que hablo. Y quizás eso jugó en favor del dúo recién formado: lo único que podían hacer era tocar juntos, conocerse todavía más y componer.
2022 y 2023 han sido años de ajetreo inesperado: editaron un EP de cinco canciones llamado Mojave en Xrecxrds que sólo existe en el universo digital, tocaron en todas los espacios alternativos de la península donde tocan bandas que hacen ruido, grabaron en tres estudios diferentes, sacaron algún vídeo muy bien editado y se convirtieron en una unidad operativa engrasada que no especula ni con su música ni con su imagen ni con su discurso.
Pronto se celebrará el cuarto aniversario de la La Joya y, desde fuera, noto el runrún en torno a ellos desde las capas más fiables del underground estatal. Por fortuna para todos, es 100% merecido. ¿Dos hombres de mediana edad cuyas canciones te hacen pensar en Codeine, en Abilene, en Karate o en grupos claves de Touch and Go Records? Póngame cuatro raciones de eso. Para cerrar un círculo mágico, Lower Hermosa está editado por Cielos Estrellados, el nuevo sello fundado y dirigido por Ramón Rodríguez, The New Raemon.
La salida de vuestro primer disco ha sido un pequeño acontecimiento en redes, si nos fijamos en la cantidad de gente diferente y medios independientes que se han hecho eco. ¿A qué creéis que se debe? ¿Estáis sorprendidos o de algún modo, después de fichar por Cielos Estrellados, lo esperabais?
Tanto como un acontecimiento, no diría. Somos bastante conservadores usando las redes. Creo que la repercusión que haya podido tener tiene más que ver con que somos muy trabajadores, hemos tocado por muchos sitios con muchas bandas y toda esa gente de alguna manera forma parte de este disco y tenía ganas de escucharlo e incluso compartirlo. Estamos muy agradecidos.
Cielos Estrellados se ha entregado desde el principio y eso nos ha dado mucha energía también. El largo proceso de sacar un disco tiene muchas sombras y Ramón y todo el equipo del sello nos han dado mucha luz.
¿Cómo le contaríais a alguien que no tuviera ni idea de qué es La Joya vuestra historia y vuestro sonido?
Básicamente somos dos amigos que nos gustar tocar juntos. Todo lo demás viene después. Tenemos un sonido espartano y minimalista porque es así como suena en el local y también es un poco un reflejo de nuestra propia personalidad. Estamos en un momento de nuestra vida que agradecemos bajar un poco el tempo y disfrutar de los silencios.
Hacedme una lista de los tres mejores momentos desde que se formó La Joya y luego de los tres peores, por favor.
Afortunadamente la historia de La Joya está llena de buenos momentos. Diría que hemos disfrutado de cada concierto. Por como entendemos esto y teniendo claro las expectativas que manejamos todo está siempre bien.
Algunos momentos especialmente buenos en nuestra memoria fueron el primer concierto en Granada con nuestros amigos de Palmar de Troya, la mini gira con Kugo, los conciertos en Picnic, Sonic Boom y Coco Bar, o conocer lugares tan especiales como los estudios La Mina y El Nido, el nuevo estudio de Brian Hunt en Cantabria.
Malos momentos muy pocos o poco reseñables. Por ejemplo, un día que no encontramos sitio para cenar después de tocar y Ricky se puso insoportable.
Vosotros tenéis una edad y eso os permite ver las cosas con perspectiva: ¿Creéis que La Joya es el resultado de un contexto económico, social y cultural (musical) determinado? ¿Cuál es ese contexto y dónde os situáis en él?
Creemos que el público está cansado de la sobreexposición en todos los sentidos. Intentamos poner el contrapunto a eso: somos discretos en nuestras comunicaciones, no perseguimos a los amigos ni a los medios y hacemos una música sincera y cercana, sin prisas y sin trampas ni grandes producciones. Al final parece que sí hay un espacio para esto, aunque seamos conscientes de que es minoritario.
FOTO ENVIADA POR LA JOYA VÍA WHATSAPP PARA ILUSTRAR ESTA ENTREVISTA. NO SÉ QUIÉN LA HIZO, SORRY.
La sensación que da desde fuera es que vais a una velocidad inusualmente alta para el tiempo que tiene el grupo y vuestras situaciones personales: grabaciones en Madrid, Asturias y Sevilla, conciertos muy seguidos en muchas partes, reconocimiento por parte del público más afín, etc. ¿Todo esto responde más a un planteamiento previo o a una oportunidad?
Creo que siendo dos personas la organización es más fácil. También tenemos un carácter parecido, siempre estamos de acuerdo en lo que queremos hacer y lo que no. Tener las ideas claras acelera mucho los planes. Somos muy organizados con los ensayos y planificamos los conciertos con cabeza. Al final este es el ritmo normal de una banda en activo. Si te fijas en grupos como Wild Animals en su día o Biznaga actualmente, puedes ver que van disparados publicando discos y dando conciertos. Esto es porque son unos currantes y funcionan de la forma más natural y honesta.
Volviendo a la pregunta creo que todo es consecuencia de estar centrado en el proyecto y ser constantes.
La escena underground estatal vive un momento muy interesante, con muchas bandas haciendo cosas, muchos sellos pero, lamentablemente, cada vez menos espacios donde poder tocar en las condiciones materiales que pueden permitirse estos grupos. ¿Nos hacéis un pequeño mapa de sitios donde hayáis tocado que sigan en activo y otro de sitios que hayan cerrado en este tiempo?
Precisamente se nos han abierto nuevos lugares para tocar que eran impensables en otras bandas en las que ambos hemos militado anteriormente. Controlamos mucho más el volumen y también el espacio físico. También podemos inclinar el repertorio en diferentes direcciones depende si estamos tocando a las 12h de la mañana en el Musli de Torrelavega, a las 18h en el Rincón Pio Sound de Don Benito o a las 23h en el Wurli de Madrid. Estamos haciendo muchas sesiones matinales o aperitivos, que era algo impensable hace unos años y hoy en día nos encanta hacer; como comentabas, ya vamos teniendo una edad para tanta nocturnidad (sobre todo Manel).
Por otro lado, la escena de la que venimos sigue funcionando muy bien y la verdad es que estamos muy cómodos en salas autogestionadas como Plug in the Gear (Benicarló), CSA Las vegas (Málaga) o Monopatín o Muerte (Salamanca). Sabemos que hay una crisis de salas –especialmente en las grandes ciudades– pero afortunadamente siempre hemos sido capaces de organizar nuestros conciertos con todas las garantías. Sólo tenemos buenas palabras para las salas y los promotores con los que hemos trabajado.
Sacar discos de vinilo se ha convertido desde hace un tiempo en una osadía o en una locura, por el aumento exponencial de los gastos de fabricación. ¿Cómo encarais esta edición?
Nos quedamos muy satisfechos con la grabación y decidimos hacer un esfuerzo y poner una edición física en la calle. Hemos minimizado al máximo los gastos y riesgos haciendo una importante parte del proceso a mano y una tirada pequeña. Cielos Estrellados está apoyando mucho y también tenemos un pre-order en marcha con Bcore, que está ayudando a moverlo. Con un poco de cabeza y varias fechas de conciertos a la vista creo que seremos capaces de recuperar la inversión de manera natural.
Todas vuestras canciones están en Spotify y el resto de plataformas. ¿Cuál es vuestra posición ante este tema? ¿Tenéis una estrategia pensada a futuro?
Nos parece bien que la música esté lo más disponible posible y luego que cada cual elija dónde y cómo quiere escucharla. A nuestro nivel hablar de cuestiones de ingresos por escuchas no tiene mucho sentido. Nos gusta Bandcamp y su filosofía pero también hay que ser consciente de las facilidades que ponen al oyente plataformas grandes como Spotify o Tidal.
Los trayectos en carretera entre conciertos dan para muchas conversaciones, especialmente cuando viajáis los dos solos. ¿Alguna conversación que se os haya quedado grabada por algún motivo? Yo todavía me acuerdo de algunas que tuve con Manel en la gira de 5 días que hicimos con Rocky Votolato, por eso lo pregunto.
Somos oficialmente una pareja de novios. Entre que somos vecinos, los ensayos y los viajes, hemos tocado todos los topics posibles en nuestras conversaciones. Hay algunos temas recurrentes como el universo trailer park, el moonshine, los desayunos con bizcochos y la cultura yanki en general. También hablamos de viejas glorias de la escena que nos encontramos a veces. Comentamos los bolos y las conversaciones que tenemos con la gente que viene. Discutimos sobre los dos primeros discos de Sunny Day Real Estate, hablamos de cómo se graban las batería de los discos de Waxahatchee y luego acabamos escuchando todos los discos de los Smiths seguidos. Lo típico de cualquier banda en la carretera. Ah, y de Bosch, una serie de maderos que nos encanta.
¿Además de los conciertos ya anunciados, me podéis contar algo en exclusiva que esté cerrado y todavía no hayáis anunciado? Esto no lo leerá nadie.
Afortunadamente estamos teniendo facilidades para cerrar varias fechas de presentación. Además de Madrid y Barcelona, estaremos por Granada en Marzo con nuestros queridos Palmar de Troya y con un grupo de screamo llamado Cuando el mar se lleva las conchas. También iremos a visitar a viejos amigos en XXXXXX, XXX XXXXXX, XXXXXXXXX, XXXXXXX o XXXXXX, por citar algunas cosas ya habladas.